Gaur goizean Fernando Buesaren hilobia, Gasteizko Santa Isabel hilerrian, gorriz zikindurik agertu da. Horrelako ekintzak tristura eta dezepzioa besterik ez dizkit ekartzen. Baina haiekin batera Buesa familiak jaso duen elkartasuna olatuak adierazle itxaronpetsuak ere ekarri ditu. Hala espero dugu!
Esta mañana la tumba de Fernando Buesa, en el vitoriano cementerio de Santa Isabel, ha aparecido profanada y pintada. Que decepción encontrarnos, en 2020, con comportamientos que nos retrotraen a décadas negras para este país. Recuerden ustedes aquellos terribles años en los que además del asesinato, se profanaba la tumba, y la memoria, de la víctima. Aquellos terribles grafitis: "¡Ordoñez jódete! ¡Ordoñez devuelvenos la bala!" parecía cosa del pasado y, sin embargo, hoy de nuevo nos amanecemos con hechos así. ¿Quiénes pueden estar detrás de estos hechos? ¿Son grupos como ATA los artífices? ¿Son los jóvenes que llaman a dar el salto a la lucha (Salto borrokara!)? ¿Será la ultraderecha? ¿Quienes pueden alentar aun el odio?
Sin embargo, no les oculto que con el sentimiento de tristeza inicial, he recuperado mi confianza en el futuro de esta sociedad. La familia Buesa-Rodriguez y la Fundacion Buesa Fundazioa ha recibido un auténtico aluvión de solidaridad. Ésta no ha venido sólo desde los socialistas, Idoia Mendia, el presidente Pedro Sanchéz, Denis Itxaso, y un largo etc han repudiado el discurso del odio, claramente, pero también desde todas las fuerzas políticas ha llegado el afecto y el cariño. Desde Podemos, PP, PNV, Berdeak, C's, Equo y EH-Bildu. Emocionantes palabras de Rafael Larreina, Miren Larrion y otros me reconcilian con sectores valientes y sinceros de esta formación que, espero, cada día sean más numerosos. Igualmente ha sido rápida la respuesta solidaria de Gorka Urtaran (mila esker alkate jauna), también el mensaje de aliento de Iñigo Urkullu, nuestro lehendakari, y otros muchos representantes jeltzales. Saben quienes me conocen que siempre he criticado la postura de este partido aquel febrero de 2000, creo sinceramente que fue el mayor error en la historia del nacionalismo moderado en Álava. Pues bien, es de justicia reconocer que me siento profundamente reconfortado por la respuesta y por la actual posición de esta formación, y así he de reconocerlo y agradecerlo. Beraz, mila esker lehendakari jauna, mila esker guztion ordezkaria izaten saiatzeagateik!!!
Sentimientos contrapuestos, tristeza y esperanza. Confiemos en que el futuro, ese que deseamos definido por la convivencia y la reconciliación, se nos dibuje con más dosis de la segunda que de la primera. Hala izan dadila!!!
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