Tira cómica: Sansón, diario El Correo
Ayusok, Madrilgo presidentea, egindakoa ezin det ulertu ikuspuntu askotatik. Nik uste det erru etikoa, marketingokoa eta politikoa izan dela. Atzokoak apalditik pentsatzen nuena baieztatu du. Gaur egungo zenbait politikari, hau adibide, hauteskundeak irabazi arren ez duten gutxienezko mailarik. Penagarria!
Realmente penosa su actuación! Lo provocado ayer por Isabel Díaz Ayuso me confirma en una de mis ideas más repetidas, y por cierto con la que rebato desde hace una década las narrativas del alumnado sobre "el régimen del 78" (políticos franquistas, democracia falsa, todo sigue igual, estamos instalados en la misma dictadura...): los políticos de la actualidad española, algunos/as se salvan, no tienen ni la vocación, ni la perspectiva de bien común, ni el nivel institucional o de gestión que tenían quienes, en mi adolescencia-juventud, iniciaron el tránsito a nuestra actual democracia. Lo siento, así lo creo.
Hace ya varios años que vengo denunciando la concepción fratricida de la acción política que se ha instalado en nuestro país. Me niego a aceptar que un diferente ideológico sea un enemigo, siempre he visto, y lo mantengo con la práctica, que los diferentes me complementan y, en todo caso, nuestras diferencias se confrontan desde el debate y los argumentos, nunca desde el insulto o la falta de empatía. Pero, lamentablemente, ayer Ayuso demostró que está realidad sigue vigente y no parece que tenga visos de desaparecer. Su actuación en la Conferencia de Presidentes (precisamente con la intervención de Salvador Illa y de Imanol Pradales, dos perfiles de acreditada moderación y que estaban allí, bienvenidos sean, por un respeto institucional que todos debemos aplaudir) fue un cúmulo de errores: error de imagen, maleducada y negadora de la pluralidad del país (hoy, sábado, el número de independentistas ha crecido exponencialmente en varias zonas españolas); error ético, no es aceptable el desprecio mostrado al diferente político, no está bien, demuestra un fondo de "pensamiento totalitario" preocupante; error conceptual, pues en vez de hablar (como sí lo han hecho otros presidentes/as de otras autonomías, como Juanma Moreno, Alfonso Rueda, Marga Prohens...) sobre la conveniencia, o no, de utilizar pinganillos, o de optar por realizar intervenciones bilingües (una opción válida, yo suelo emplearla en mis intervenciones académicas y resulta aceptada siempre), un debate legítimo y que se puede plantear, ha hecho una apología del nacionalismo lingüístico vigente anterior a 1977.
Cúmulo de errores, torpeza política extrema, populismo, ausencia de educación y respeto institucional y...podría seguir. Que no se pueden combatir las torpezas de otros con torpezas mayores, que no, que el país está llegando a niveles de crispación y trinchera insoportables y ella, "la presidenta", ayer dio una lección de lo que nunca debe ser una representante política. Aunque le de votos, y eso es evidente, me niego a aceptar esta especie de política de plató televisivo.
Mi nota: suspenso, sin posibilidad de recuperar en otra convocatoria.